No es fácil describir lo que estoy viviendo por estos días.
Tengo una mezcla de sentimientos y recuerdos que se agolpan en mi cabeza,
Es
bastante difícil relajarme y pensar en otra cosa porque cualquier detalle me
dispara más y más recuerdos.
Pequeñas imágenes
desordenadas que son como la punta de una soga de la que empiezo a tirar y
aparecen más y más. Pero a la
vez todo me es un poco ajeno, como si le hubiera pasado a otro, un yo
chico por el cual siento algo de misericordia y pena.
Todo esto soy yo el pasado, el presente y el futuro, todo mi vida esta
resumida en esto que estoy viviendo hoy.
Cuantos años hace que busco una respuesta? cuantas veces fantasee, con
encontrar a mi madre?
cuantas veces lo intente sabiendo que no llegaría hasta el final?
cuantas veces pensé como sería ese encuentro? Cuantas veces me sentí absolutamente abatido y desolado por esta
historia? cuantas veces experimente la autocompasión?
Todo esto soy yo, el que esta acá tratando de explicar y el fue todas
esas preguntas.
Solo que llegue a un lugar en el cual me di cuenta que no
podía continuar haciéndome todas estas preguntas y no
intentar descubrir las respuestas. Es fácil preguntar lo difícil es soportar
las respuestas.
Por eso es que esta vez decidí buscarla e ir a fondo y en mi fantasía creí que
lo más probable era que estuviera muerta. Pero la encontré, más rápido de lo que imagine y más cerca de lo que pensé.
Ahora me doy cuenta que la realidad no se parece a ninguna de las
posibilidades con las que especule.
Nada es como uno imagina, la realidad siempre te sorprende, por ser distinta o
simplemente por ser real.
El encuentro con Ebe fue muy fuerte y poco a poco me fui enterando que ella no
había sido la que me abandono como yo creía, ella también había sido la víctima en esta historia. Mi viejo no
supo, no pudo o no quiso manejar de otra manera las cosas y me llevo, y la dejo a ella sin derechos, sin opciones. Le negó
criarme, le negó verme, le nego el derecho y toda la familia fue un poco cómplice. Era otra época y los prejuicios quizás eran tantos
o más que ahora.
De golpe sentí que toda mi historia, la que conté, la que creí conocer como
cada uno de nosotros conoce su historia. no era así , era otra , era distinta pero lo curioso era que nada me sorprendía
demasiado todo lo que ahora se revela como nuevo estaba ahí, estuvo siempre solo había que saber mirar
un poco más a fondo, leer entre líneas.
Pero obviamente, como iba a hacerlo si se trataba de mi viejo, como no iba a
creer en lo que él me contara aunque yo sospechara un poco de exageración de heroísmo en su relato.
A veces pienso en esas historias de hijos de desaparecidos y recuperados por
las abuelas que leí tantas veces y siento que esto es algo similar en algunos aspectos. Pero mi viejo no fue un
asesino aunque dejo muchas gente herida por el camino y mi vieja la que me crió
también jugo su papel. Todos jugaron su papel, todos, me refiero a la familia
de mi viejo tíos y tías, jugaron su papel y fueron bastante crueles con Ebe.
No sé, no puedo contar las cosas cronológicamente como un cuento,
prefiero contárlas así como me van saliendo. Todo esto que cuento esta hoy en mi cabeza, más algunos recuerdo de la
infancia que ahora se resignifican a la luz de la verdad o de esta verdad, porque no puedo parar de pensar y pensar en el pasado, porque
ahora todo se resignifica.
Todo vuelve y es distinto, es nuevo, adquiere otro sentido.
